ORLANDO.- La temporada de los Orlando Magic y de Paolo Banchero ha sido una auténtica montaña rusa a causa de los problemas físicos. El propio Banchero se perdió 36 partidos debido, principalmente, a un desgarro muscular, aunque llegó a pleno rendimiento a unos playoffs donde fue el mejor de su equipo pese a caer ante Boston Celtics en cinco partidos.
Banchero promedió 29,4 puntos, 8,4 rebotes y 4,2 asistencias en la eliminatoria, pero sus buenos números vinieron acompañados de un sabor muy amargo tras caer por segunda campaña consecutiva en primera ronda.
«Estadísticamente esta es mi mejor temporada, pero no lo siento así», comenzó el ala-pívot, según recoge el periodista Marc J. Spears. «Realmente afronté este curso esperando dominar hasta los playoffs y lograr todos mis objetivos. Así que, cuando eso no sucede, deja mucho que desear y te queda un gran vacío. No voy a empezar la pretemporada pensando: ‘Acabo de tener un año espectacular, estoy bien’. No. Siento como si me hubieran robado algo. Nadie lo ha hecho, pero así es como me siento. Solo tengo ganas de desquitarme».
Sobre su potencial extensión de contrato por cinco años y 250 millones, Banchero expresó su deseo de continuar en Orlando y asumir la responsabilidad que ello supone. «Ese es el objetivo de todo jugador joven que llega a esta liga: consolidarse pronto y conseguir ese segundo contrato. Así que, cuando llegue el momento, estoy seguro de que todo eso se resolverá. Dicen que a más dinero, más problemas, pero veremos qué pasa».
Esta misma semana, el presidente de los Magic, Jeff Weltman, aseguró que abordarán el verano con la prioridad de corregir los dos principales problemas de la plantilla: el tiro exterior y la versatilidad ofensiva. Unas debilidades que comparte Banchero. «Tenemos una idea clara de nuestras fisuras y de lo que necesitamos mejorar. Solo tenemos que abordar algunos de esos aspectos. Tengo muchas ganas de ver qué cambios se harán. Pero estaré listo para ponerme a trabajar, tanto si hay cambios como si no los hay».
